Dolor de cabeza, disminución de la audición y hasta depresión figuran entre los males causados por los aparatitos digitales.
Madre del niño: Saluda mi amor
Niño: (Silencio)
Madre del niño: jajaja lo siento, este chiquito malcriado no sabe saludar. ¡Saluda hijito! sino te quito tu iPad
Niño: Hola (no hace contacto físico ni visual con la otra persona y sigue jugando)
El 84,5% de los niños/niñas y adolescentes bolivianos de 6 a 18 años tienen acceso a teléfonos inteligentes o smartphones, 21% a un computador y 6% a Internet según los estudios de la CEPAL de 2012. Si bien lo positivo de usar estas nuevas tecnologías es la estimulación de partes especificas del cerebro, su uso no debe exceder de las dos horas por día, ya que su exceso puede repercutir en el aprendizaje, aislamiento personal, depresión infantil, insomnio, adicción y copia de conductas no aceptables socialmente, según la psicóloga Isabel Clavijo.
También puede producir inflamación en el oído y lesiones en el nervio auditivo si el ruido constante de las tablets, smartphones e Internet superan los 80 decibeles, manifestó la doctora Cecilia Jové, otorrinolaringóloga infantil-adulto, pues el volumen máximo que debe escuchar una persona es de 30 decibeles en el día y 25 en la noche.
Otro de los problemas es la excesiva formación de cerumen en el oído que ocasiona dificultad en la audición y el tinnitus que es el zumbido posterior a un daño que es causado por un trauma acústico, añadió.
El uso constante de las tecnologías de información y la comunicación en niños y adolescentes por la luz azul y la actitud de cerca con estos aparatos podría ocasionar además de lo mencionado, ojo seco, escozor en los ojos, lagrimeo, dolores de cabeza, enrojecimiento y fatiga visual, pero estos síntomas no son exclusivos de los tics, pues otros factores también influyen en estas afecciones de la vista, indicó la oftalmóloga- pediatra, Alexia Romanelli.
Los niños tienen “el derecho al esparcimiento, al ocio, a la diversión al juego, mediante internet y otras tecnologías”, sin embargo, también tienen “derecho a que los juegos y las propuestas de ocio no contengan violencia gratuita, ni mensajes racistas, sexistas o denigrantes y que respeten los derechos y la imagen de los niños y niñas y otras personas”, según el artículo 7 del Decálogo de los derechos de la infancia en Internet.
Las alertas que los padres deben tomar en cuenta para prevenir los problemas de salud y de socialización ya mencionados, son: cuando su hijo o hija prefiere dejar de comer o dormir por jugar o cuando el menor de edad sigue comiendo sin importar la cantidad o naturaleza de la comida mientras se encuentra en contacto directo con el Smartphone, señaló la psicóloga Clavijo.
Un aspecto relevante, es que el creador de Apple, Steve Jobs, en una entrevista para el New York Times manifestó que sus hijos no usan estos aparatos tecnológicos, a pesar que el 2013 la empresa que dirigía lanzó una campaña que buscaba “que las escuelas cambiaran los cuadernos de toda la vida por futuristas iPads”.
Sin embargo, si los padres desean que los niños convivan con estas tecnologías, deben tener en cuenta que, de acuerdo a la Academia Americana de Pediatría, lo recomendable es que en la primera infancia, de 0 a 2 años, no deberían tener contacto alguno, de 3 a 5 años, el tiempo máximo es de una hora al día y en el rango etáreo de 6 a 18 años, no debería sobrepasar las dos horas, siempre con la supervisión de un adulto.
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